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Quien tenga pasaporte suizo y viva en el extranjero puede votar en Suiza, e incluso postularse al Parlamento. Sin embargo, en la propia Suiza se levantan voces que cuestionan los derechos políticos de la “Quinta Suiza”.
Desde que se fundara en 1848 el Estado federal, los suizos en el extranjero tuvieron que esperar exactamente 167 años para que, por primera vez, fuese elegido uno de ellos al Consejo Nacional: en 2015, el prominente ex diplomático Tim Guldimann (PSS), con residencia en Berlín, llegó como el primer “auténtico” suizo en el extranjero al Parlamento. Hay razones que explican la exigua presencia de la “Quinta Suiza” en el Parlamento: a diferencia de Guldimann, la mayoría de los candidatos son desconocidos, tanto en Suiza como en el extranjero. A pesar de este obstáculo, el interés por ejercer un mandato va creciendo. Mientras que en 1995 sólo se presentaron tres suizos en el extranjero, en 2015 ya eran 56. También aumenta ligeramente el interés por ejercer el derecho al voto en el país de origen: en 2018, el número de inscritos con derecho a voto pasó de 172 000 a 174 000, de una población total de 752 000 suizos en el extranjero.
Una vez que un ciudadano o ciudadana afincado en el extranjero es elegido para el Consejo Nacional deben superarse algunos problemas. Éstos empiezan con el artículo 10 de la ley del Parlamento, a tenor del cual “los miembros del Consejo tienen la obligación de participar en las sesiones de los consejos y las comisiones”. Y deben hacerlo de forma presencial: no pueden participar en el debate parlamentario o en una sesión de la comisión a través de Skype, ni siquiera si viven en Australia. Los viáticos, a veces cuantiosos, corren a cargo del Estado, que paga a cada miembro del Consejo Nacional el traslado a Berna, independientemente de su lugar de residencia, incluso si viene desde Sudamérica. El viaje se rembolsa hasta la frontera suiza. Dentro de territorio suizo, todos los parlamentarios cuentan con un abono general de transporte.
A esto se añade otro problema si se quiere asumir el mandato del Parlamento helvético desde el extranjero: no es fácil vivir en un país y hacer política en otro. Tim Guldimann resumió el dilema así: “No es lo mismo ir en un tranvía de Zúrich que en el metro de Berlín”. Como suizo en el extranjero, sólo logró tener presencia limitada en su circunscripción electoral de Zúrich; dimitió a principios de 2018, pasados dos años de su elección.
A pesar de ello no cesan los esfuerzos por asegurar la presencia institucional de la “Quinta Suiza” en el Parlamento. Hace unos diez años, dos parlamentarios propusieron, sin éxito, que el Consejo Nacional y el Consejo de los Estados reservasen escaños exclusivos para los suizos en el extranjero. Esta medida no es muy común en Europa: sólo Francia, Italia, Croacia, Portugal y Rumanía cuentan con escaños fijos para su diáspora.
Tarde o temprano volverá a debatirse este problema: ¿deben los ciudadanos y ciudadanas que viven en el extranjero tener garantizados en el Parlamento determinado número de escaños? Según informa Ariane Rustichelli, Directora de la Organización de los Suizos en el Extranjero (OSE), existe actualmente un grupo de trabajo del Consejo de la OSE que se aboca a analizar este problema y presentará su informe final, junto con las recomendaciones correspondientes, en el transcurso del año 2019.
En la arena política helvética también se levantan algunas voces aisladas para reclamar una limitación del derecho al voto de los suizos y suizas en el extranjero, en vez de su ampliación. En declaraciones a Swissinfo, Andrea Caroni, miembro del PLR en el Consejo de los Estados sostuvo que “no es lógico que personas que nunca han vivido en Suiza y no tienen la intención de volver, tengan aquí derecho al voto, mientras que hay extranjeros perfectamente integrados en Suiza que no pueden expresar su opinión en cuanto a decisiones que les afectan directamente”. Peter Keller, miembro de la UDC en el Consejo de los Estados, impugna los privilegios de los ciudadanos con doble nacionalidad quienes, opina Keller, deberían decidir dónde y cómo quieren ejercer su derecho de voto. “Esto se aplica tanto a los suizos con doble nacionalidad que tienen su residencia aquí, como a los suizos en el extranjero con dos nacionalidades: ellos también sólo deben tener derecho a votar en un país”, argumentó Keller el año pasado en una interpelación.
La cuestión de la doble nacionalidad también ocupa a la Comisión Federal de Migración (CFM) que, en un estudio de diciembre de 2018, señala que prácticamente tres cuartos de los suizos que viven en el extranjero tienen una segunda nacionalidad. “Desde el punto de vista de la política democrática parece bastante problemático que el reconocimiento de la doble nacionalidad contribuya a que cada vez haya más personas que pertenecen formalmente a un país con el que no tienen relación alguna más allá de la nacionalidad. En Suiza se trata de un problema particularmente acuciante, debido a que las suizas y los suizos en el extranjero tienen, por principio, pleno derecho de participación. Por ello sería conveniente abrir el debate para determinar durante cuántas generaciones debe trasmitirse la nacionalidad suiza de los suizos y las suizas en el extranjero”.
Esto no significa que deban retirarse los derechos civiles a los suizos en el extranjero, como lo subrayó uno de los autores del estudio ante varios medios. Pero habría que discutir sobre el derecho al voto que se desprende automáticamente de estos derechos. En los suizos en el extranjero de primera generación, el derecho al voto está justificado; pero a partir de la tercera generación ya “casi no existen argumentos a favor del derecho al voto”. Podría incluso darse el caso de que este grupo de la población decidiera el resultado de una votación en Suiza sin haber vivido jamás en este país.
Ariane Rustichelli, Directora de la OSE, se opone tajantemente a cualquier limitación de los derechos políticos. La limitación temporal excluiría a una parte de la población suiza de sus derechos: “De hecho, esto equivaldría a crear distintas categorías de ciudadanos”. Además, muchas de las propuestas sometidas a votación también revisten importancia para los suizos en el extranjero, independientemente del tiempo que lleven residiendo fuera de Suiza, como pueden ser las cuestiones relacionadas con el seguro de vejez AHV, los acuerdos internacionales o las relaciones con la UE. Después de todo, la mayoría de los 752 000 suizos en el extranjero viven en un país europeo (más de 482 000) y muchos también retornan con regularidad a Suiza. Además, el punto de vista de los suizos en el extranjero enriquece a Suiza, señala Rustichelli.
Suiza no es el único país que mantiene esta postura. Como lo revela un informe del Consejo Federal de 2016, la mayoría de los Estados europeos “no contemplan requisitos específicos para conceder derechos políticos a sus ciudadanas y ciudadanos en el extranjero”. En otros términos, rigen para ellos las mismas normas que para los votantes que residen en el país. Sin embargo, Alemania, Suecia y Gran Bretaña establecen requisitos adicionales para otorgar el derecho de voto a sus ciudadanos en el extranjero. En Suecia, éstos sólo obtienen el derecho al voto si han residido una vez en el país. En Gran Bretaña, los ciudadanos en el extranjero deben haber estado registrados en una circunscripción electoral del país en los últimos quince años. Por su parte, Alemania exige de los ciudadanos que viven en el extranjero que hayan realizado una estancia de al menos tres meses en el país tras haber cumplido los catorce años de edad, y que ésta no se remonte a más de veinticinco años.
Tema relacionado: ¡Nada más fácil que inscribirse en el registro electoral!
Comentarios
Comentarios :
Je suis intéressé de voter pour mon pays. Je réside en France, mais je resterais toujours Suisse.
- How many Swiss abroad regularly vote?
- How many of them are 1st generation emigrants?
- How many are 2nd generation?
- How many are 3rd generation?
Is it a real issue that later generation people who've rarely if ever been to Switzerland can vote, or are there in fact very few such people who do vote? Why make rules for a very very tiny group?
As for dual nationality, there is no reason why dual nationals shouldn't vote in two countries. They are knowledgeable about and committed to two countries, so why shouldn't they vote in both?
Je partage avec vous l'opinion qu'il est indispensable que chaque suisse, en Suisse ou à l'étranger, puisse voter sans entraves. Cependant, le vote élétronique a été sujet d'études et elles ont démontré qu'il n'est pas sûr à 100%. Cette fallibilité du e-voting fait dommage à notre démocratie et remet en question le résultat du vote. C'est pourquoi je ne soutiens pas le vote électronique.
En tant que Suisse à l'étranger, je reçois les papiers de vote bien à l'avance du vote et j'ai toujours eu le temps de voter avec ponctualité. Si certaines personnes reçoivent les papiers de vote trop tard, elles devraient contacter les autorités pour qu'elles envoient les bulletins plus rapidement. Il est bien sûr indispensable que chacun puisse voter sans obstacles.
Wohin es führt, wenn dieses Recht beschnitten wird, hat man bei der Brexit-Abstimmung gesehen. Von über einer Million Briten, welchen vom Ausgang direkt betroffen sind, konnte eine grosse Anzahl nicht an der Abstimmung teilnehmen, da sie seit mehr als 15 Jahren in der EU arbeiteten oder als Rentner lebten.
Wenn Politiker wie Caroni (FDP, AR) und Keller (SVP, NW) mit dem Argument, dass Ausländer in der Schweiz nicht abstimmen können, die Beschneidung des Stimm- und Wahlrechtes der Auslandschweizer und Auslandschweizerinnen fordern, liegen sie grundfalsch. Dass ein Viertel der in der Schweiz lebenden Erwachsenen von wenigen Ausnahmen abgesehen nicht an lokalen Abstimmungen teilnehmen dürfen, auch wenn sie seit Jahrzehnten oder ihrer Geburt in der Schweiz leben, ist auch falsch.
Die Mehrheit der Auslandschweizerinnen und Auslandschweizer, nehmen ihr Stimm- und Wahlrecht nicht wahr. Dies ist eine persöhnliche Entscheidung, welche jede und jeder von uns dies selber fällen muss. Es gibt ganz klar gute und ehrenwerte Gründe für ein Nichtteilnehmen und dies wird auch respektiert.
Andererseits haben sich 172'000 Auslandschweizerinnen und Auslandschweizer im Stimmregister einer Schweizer Gemeinde eingetragen. Dies entspricht der Stimmbevölkerung des Kantons Thurgau. Wir wollen abstimmen und wir sind besorgt über die populistischen Vorstösse einiger Politiker, welche das Stimm-und Wahlrecht der Auslandschweizerinnen und Auslandschweizer begrenzen wollen. Dies ist Diskriminierung von Schweizer Bürgern. Stellen Sie sich den Aufschrei vor, wenn man allen Thurgauern das Stimm- und Wahlrecht entziehen würde.
Ich fände es für die Schweiz, als Aushängeschild von gelebter Demokratie falsch Bürger erster und zweiter Klasse zu erschaffen.
Wenn aber das Wahlrecht entzogen werden sollte, gibt es eigentlich auch kein plausibles Argument mehr in der Schweiz wohnenden Ausländern das Stimmrecht zu verweigern.
PS: Hätten die ‘Auslandbriten’ abstimmen können, dann wäre den Briten vielleicht diese Horrorshow erspart geblieben...
Une chose fondamentale, qui dérange les esprits un peu renfermés, une vision du monde moins nombriliste et cela est essentielle pour un pays qui pense être un des nombrils du monde.
Évidement, pour ceux qui vivent repliés sur eux-même, ce n'est pas bien venu de mettre en doute que la terre tourne aussi ailleurs.
Jetzt kommen diese Politiker und wollen mir das Recht zum Abstimmen wegnehmen. Wovon haben sie wohl Angst? Soll es denn zwei Klassen Bürger geben, solche die in der Schweiz leben und abstimmen können und solche die es nicht können. Als Schweizer Bürger habe ich das Recht jederzeit wieder zurück zu kehren, als sollches interessiert es mich sehr wie sich die Schweiz entwickelt. Mir das Recht zu entziehen ist schlichtweg absurd und diktatorisch
Eher weniger sinnvoll empfinde ich es, sich als "Volksvertreter" für die Diaspora wählen zu lassen. Zu gross sind da nur schon unterschiedlichen Interessen der in verschiedenen Ländern lebenden Expats. Wie soll da ein Vertreter der 5. Schweiz diese Interessen vertreten, ohne zwangsläufig in ein unlösbares Dilemma zu geraten?
Je dirais si on peut separer les affaires locales (communales, cantonales) et celles du pays. En tant que Suisse j'aimerais au moins voter pour celles qui affectent mon pays.
1. A person should have been born in Switzerland, have lived there at least 5 years and still speak one of its languages well. Helpful would be evidence of continued interest by frequent visits say, every 1-4 years.
2. If you're a citizen without the above criteria but you pay taxes in Switzerland -- you should be allowed to vote.
3. If you're # 1 and hold a dual passport, you should not be allowed to vote. CH cannot tell whose interests you're voting for.
4. If you're #2 and hold a dual passport, you should be allowed to vote because taxes are a proxy for loyalty to and continuing personal interest in Swiss affairs.
5. Those who were born in CH but didn't live there 5 years, have lived somewhere else all this time, probably don't speak any of the languages well, should not be allowed to vote-- even if they follow political events and return often to see relatives. I would apply this criterion to myself even though I speak French and Italian relatively well.
6. Those who were not born in CH but became citizens through other means, have another citizenship, vote elsewhere and probably don't speak the languages well should not be allowed to vote.
7. It's an insult to Switzerland to imply that it creates 2nd class citizens by regulating voting -- especially by those who vote elsewhere. I find it to be an incredible privilege to retain an expired Swiss passport which can be used to prove my citizenship. This means that, at any time, I could return and re-register and have my full citizenship plus voting rights restored. And what *that* means is that voting rights are not permanently taken away. For those who don't qualify to vote from overseas, they're just mothballed until you return.
8. Part of the revised Swiss Government policy on voting should be that such reversibility is easily obtained, without a lot of red tape, once a citizen returns home.
9. Running for office while abroad is absurd and should be out of the question. As the representative living in Berlin found out. He couldn't do a decent job of representing his constituency from long distance.
10. Although I agree with him, I have no relation to Peter Keller, SVP
Qu'est-ce qui détermine l'appartenance à un pays? La où on travaille et où on produit de la richesse et où parfois on vit de l'aide social, ou là où l'on dépense son argent, ou là où on est propriétaire ou locataire et où on paie des impôts ou, où on ne paie pas d'impôts parce-que on ne gagne pas assez ?
Parce-que aujourd'hui on demande si les expatriés doivent voter, mais demain la question se posera pour les plus pauvres qui sont au chômage et ne paient pas d'impôts. Ont-ils eux aussi le droit de voter ?
La question est plutôt que doit refléter le vote? Sinon la diversité des opinions. A rester en vase clos on se sclérose. A s'ouvrir à d'autres idées on s'adapte mieux.
N'opposons pas les Suisse de l'intérieur à ceux de l'extérieur.
Partout là où je vais je fais l'éloge de la Suisse à laquelle je suis profondément attachée. Et j'ai encouragé des amis cadres supérieurs à s'y installer pour la faire prospérer, parce-que la Suisse manque de main d'oeuvre qualifiée.
Je vote lorsque j'estime apporter une plus-value et m'abstiens lorsque la votation porte sur un sujet pour lequel je pense ne pas avoir mon mot à dire.
Et pour finir. Voter de l'étranger n'est pas simple. Donc si l'on fait cette démarche, c'est que l'on est impliqué dans la vie du pays.
My older daughter turned 18 last year, and while she has never lived in Switzerland, she is thrilled to vote. It's a great opportunity for her and I to discuss about relevant political choices in Switzerland and for her to understand her country better.
This is a difficult issue, and I understand and accept some of the arguments made by those suggesting Swiss citizens who have never lived in Switzerland should not be allowed to vote. However, it would in my opinion set a dangerous precedent (as mentioned by one of the persons in the article): there would be first and second class Swiss citizens. For those with dual nationality, it could be argued that voting rights could be subject to specific conditions.
Wer sich aber so weit von der Schweiz abgenabelt hat, dass er kaum weiss, was in diesem Land vor sich geht, wird sich gewiss nicht um sein Stimmrecht bemühen.
Ich wohne seit 36 Jahren in Spanien, fahre aber jedes Jahr mindestens zweimal in die Schweiz. Meine Familie wohnt dort und mein Sohn, ein Doppelbürger, arbeitet nun auch in der Schweiz und hat vor, dort zu bleiben.
Ich interessiere mich daher auch für das politische Geschehen in meinem Heimatland und begrüsse es, dass ich von hier aus zumindest auf Bundesebene abstimmen kann.
Trotzdem mein Mann ein gebürtiger Spanier ist, musste ich einige Jahre warten, bis ich die spanische Staatsbürgerschaft erwerben konnte. Ich musste beweisen, dass ich Spanisch sprechen konnte und zwei Spanier mussten bezeugen, dass ich mich in Spanien integriert habe. Bis zu diesem Zeitpunkt konnte ich selbstverständlich nicht an den hiesigen Wahlen teilhaben. Will ein in der Schweiz lebender Ausländer das Stimmrecht erhalten, sollte er sich um die Einbürgerung bemühen und somit bekunden, dass ihm dieses Land etwas bedeutet.
Laissez la possibilité de voter a ceux qui le veulent.
Allerdings sollte man dann mit der Militärpflicht für Auslandschweizer auch abfahren. Es ist zwar nur eine Formalität, aber eine die nicht zu verpassen ist.
Et quoi encore ? Je vis en France car j'y ai ma vie (une carrière de fonctionnaire qui m'empêche toute mutation extra-territoriale, des proches qui eux aussi ont des attaches fortes à la France).
MAIS cela ne remet pas en cause le lien affectif que j'ai avec la Suisse. Y voter me permet justement de manifester mon intérêt pour ce pays, pour lequel je me sens un attachement profond.
J'ai délibérement décidé de transmettre ma nationalité helvète à mes deux enfants.
Ils feront ce qu'ils voudront de leurs vies : vivant en France ou en Suisse. Ce sera à eux d'en juger.
Mais nous remettre à ce point en question serait un acte vexatoire sans appel. Une chose que j'aurais du mal à accepter.
Et pourquoi ne pas nous demander d'ailleurs de rendre notre passeport, tant qu'on y est.
Sommes-nous des délinquants qu'il faudrait déchoir de leur nationalité ? Car le premier exercice de la nationalité, n'est-il pas le vote ?
Voyons un peu de réflexion et moins d'ostracisme !
Nous habitons ma femme et moi dans le Sud de la France depuis 2006. , Nous sommes toujours intéressés par la politique fédérale, cantonale et communale du pays . Nous recevons très régulièrement les documents pour les différents votes . Nous ne manquons pas d’exercer notre droit. Nous sommes nés en Suisse . Nos enfants sont restés au pays.
Nous sommes suisses et nous le resterons .
Cela étant dit, je suis tout à fait d'accord que de tels droits ne devraient pas s'étendre au fil des générations à des gens qui ne sauraient rien de la Suisse. Il me semblerait raisonnable de ne donner le droit de vote qu'à ceux qui auraient vécu au moins 5-6 ans (sans compter l'enfance) en Suisse.
Cependant, je serais en faveur de restreindre ce "privilège" aux suisses qui ont vécu en Suisse un certain temps, et d'obliger un élu à avoir sa résidence principale en Suisse.
AG, BE, BS, FR, GE, LU, NE, SG, TG und VD.
Mehr zum Thema: https://www.aso.ch/files/webcontent/direction/Factsheets/ASO_Factsheet_E-Voting.pdf
Bonne continuation.
Je suis tout à fait d'accord avec Ginette Membrez. Je suis né en France, j'ai la double nationalité. Je m’intéresse beaucoup à ce qui se passe en Suisse. J'y ai vécu quelques années, mon fils y a fait ses études supérieures, mais je suis totalement largué en ce qui concerne la politique intérieure. Je vote en France et j'y ai beaucoup réfléchi. Puis, j'ai pris la décision de ne pas m'inscrire sur les listes électorales suisses. Par contre, cela est la décision de chacun et je la respecte. J'estime donc qu'il est scandaleux de vouloir interdire aux suisses de l'étranger de voter, s'ils le désirent. S'il advenait que je retourne vivre en Suisse, ce serait le contraire. Je ne voterai plus en France et je n’inscrirai sur les listes électorales de ma résidence. Par contre, bien que cela semble contradictoire, je trouve indispensable que les suisses de l'étranger soient représentés. A lors, comment faire, car, c'est là que les choses se compliquent.
Aus meiner Sicht gibt es durchaus Abstimmungen welche mich als Auslandsschweizer betreffen und ich würde mich als Bürger zweiter Klasse fühlen, dürfte ich nicht mehr abstimmen. Gerade ein Land wie die Schweiz, welches die Demokratiefahne immer sehr hoch hält, sollte vermeiden Bürgerinnen erster und zweiter Klasse einzuführen.
Schon immer habe ich es für mich persönlich so gehalten, dass ich zu Themen welche mich nicht direkt betreffen nicht abgestimmt habe, selbst als ich noch in der Schweiz lebte. Doch diese Entscheidung sollte den Bürgerinnen und Bürgern selbst überlassen sein. Dies nennt man Demokratie.
Ich selber wohne auch in Thailand und kann rechtzeitig mit dem e-voting auf Bundesebene abstimmen.
Sich vorher schlau machen was gilt, wäre natürlich Voraussetzung dazu.
Und bei Doppelbürgern sehe ich ein, dass diese nicht wählen sollen, auch bei solchen, die nie in der Schweiz gelebt haben.
Vielleicht haben Sie auch mitbekommen, dass das e-Voting nur in wenigen Kantonen funktioniert, bitte nehmen Sie das zur Kenntnis, oder machen Sie sich schlau darüber.
AG, BE, BS, FR, GE, LU, NE, SG, TG und VD.
Mehr zum Thema: https://www.aso.ch/files/webcontent/direction/Factsheets/ASO_Factsheet_E-Voting.pdf
The last time I visited Switzerland was in 2005 and I felt like a stranger, a tourist, who fumbled with money I didn't recognize anymore, didn't realize (or too slow) that "Halbtax" didn't have anything to do with "Steuern", that "police" didn't have anything to do with "Polizei" but an insurance policy, almost got lost in the town I grew up in, etc. I never contributed anything to AHV or, on an apprentice wage, not much, and do not receive, nor expect, any support from Switzerland. I left as a young person and returned as an oldie visitor.
When it gets to that stage it is really high time to accept that 'we' are not really Swiss anymore and should not have the right to meddle in Swiss politics. The reason I am writing in English? Because it comes easier to me. Though, I think my spoken Swiss language is still pretty good and, funnily enough, much of it is that of a 20 year old from the late sixties because I have never really learnt Swiss adult speak.