Suiza aportará 542 millones de francos al nuevo presupuesto de cinco años de la Agencia Espacial Europea (ESA). Con ello afianza su presencia en la investigación espacial. Suiza lidera algunos programas como, por ejemplo, la misión para localizar desechos espaciales y derribar de forma controlada los satélites que han dejado de ser operativos.
En Colombo, capital de Sri Lanka, una empleada de la embajada suiza fue secuestrada en noviembre y forzada a revelar información confidencial: un hecho que las autoridades suizas califican de “muy grave e inaceptable”. El gobierno de Sri Lanka refuta la versión suiza de los hechos. Los observadores creen que este incidente está relacionado con la huida de un alto funcionario esrilanqués a Suiza.
En noviembre, los delegados de la Federación de Iglesias Evangélicas de Suiza votaron por amplia mayoría a favor del matrimonio entre parejas homosexuales. No obstante, los pastores reformados seguirán teniendo la opción de decidir si desean unir a parejas homosexuales. Esta decisión clave a favor del “matrimonio para todos” se tomó sobre el trasfondo de la iniciativa parlamentaria de los Verdes Liberales, que solicita que cualquier pareja pueda tener acceso a todas las formas legalmente reguladas de convivencia, independientemente del sexo o la orientación sexual.
En el cantón de los Grisones no se creará ningún parque eólico de grandes dimensiones. Los electores del municipio de Lugnez, sitio previsto para el parque, se opusieron a la instalación de aerogeneradores de hasta 100 metros de alto alrededor del monte Um Su, que culmina a los 2 357 metros. Alegaron que la protección del paisaje alpino debe prevalecer sobre la creación de un parque eólico, por más que éste sea conveniente desde un punto de vista ecológico.
Los ginebrinos quieren decidir democráticamente sobre el futuro del aeropuerto de su ciudad. Con amplia mayoría votaron a favor de la inclusión de su derecho de participación en la constitución ginebrina. Una novedad es que en el desarrollo del aeropuerto no sólo deberán tenerse en cuenta los aspectos económicos, sino también, y en igual medida, la protección medioambiental y la calidad de vida de los vecinos. Los actores económicos se opusieron enérgicamente a este cambio, aunque sin éxito.
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